
El Ayuntamiento de Majadahonda ha implementado un nuevo protocolo de voluntariado en el Centro Integral Canino de Majadahonda (CICAM) con el objetivo de mejorar la atención y el cuidado de los animales domésticos, especialmente perros y gatos, hasta su adopción.
Este documento establece normas y procedimientos que buscan garantizar la seguridad y el bienestar de las mascotas y optimizar el trabajo de los voluntarios del centro.
Reglas específicas para perros y cachorros
En el caso de los perros adultos, el protocolo señala la importancia de evitar conflictos entre animales que no se toleran y recomienda paseos en entornos tranquilos para minimizar su estrés. Además, los juguetes destinados a los animales deben ser supervisados por el personal del CICAM, que también proporciona asesoramiento sobre higiene y cuidado. Entre las actividades recomendadas para los voluntarios están los juegos cognitivos, el entrenamiento con instrucciones sencillas y amables, y la observación de cualquier cambio en el comportamiento o estado de salud, que debe ser comunicado al equipo veterinario.
Para los cachorros, se especifica que no deben acceder a zonas exteriores hasta haber completado su pauta de vacunación. También es fundamental respetar sus tiempos de descanso y realizar actividades que fomenten su desarrollo, como el cepillado y el entrenamiento de conductas. Como en el caso de los perros adultos, cualquier anomalía detectada debe ser notificada al personal del centro.
Atención especializada para gatos
El protocolo destaca que los gatos requieren un trato específico que respete su naturaleza independiente. Se recomienda ofrecerles juegos y estímulos que les permitan trepar, esconderse y explorar, garantizando siempre que puedan alcanzar el juguete para evitar frustraciones. Las caricias deben ser breves y en zonas como la cara o el cuello, evitando tocar áreas sensibles como la tripa. Además, los gatos deben socializar en pequeños grupos, especialmente si son cachorros.
Los voluntarios deben prestar atención a señales de incomodidad en los felinos, como las orejas hacia atrás, la postura encorvada o las pupilas dilatadas, evitando forzar el contacto. Al igual que con los perros, cualquier cambio en el comportamiento o posible problema de salud debe ser comunicado a los servicios veterinarios.
Medidas de seguridad y normas generales
El protocolo incluye indicaciones de seguridad para interactuar con los animales, como acercarse a los perros con calma y evitando el contacto visual directo o gestionar su nerviosismo sin sobreexcitarlos. En cuanto a los gatos, se prohíbe acceder a determinadas áreas, y se debe seguir un orden específico al visitar las instalaciones para prevenir la transmisión de enfermedades.
Los voluntarios están sujetos a horarios y normas estrictas. Deben registrarse al entrar, describiendo las tareas que realizarán, y tienen una estancia máxima de dos horas y media, salvo excepciones. Además, no pueden interferir en el proceso de adopción, reservado al personal especializado del CICAM.
Este protocolo busca profesionalizar y estructurar la labor de los voluntarios, garantizando así una atención adecuada para los animales bajo el cuidado del CICAM y facilitando su integración en nuevos hogares.
Escribir un comentario